martes, 29 de diciembre de 2015

LA POBREZA DE LA RIQUEZA

se pierde un pulmón ecológico en Antioquia

Que gran dolor se siente en la vía al mar cuando se va  de Medellin hacia turbo les diré porque:

El sector de la llorona entre dabeiba y mutatá siempre ha sido un pulmón, un derroche de naturaleza en antioquia y de grata recordación pues llevamos casi 40 años transitando este sector, que otrora era el terror de conductores y pasajeros que sentían un gran temor de pasar por estas latitudes.
Por lo general los viajes eran en la noche por cuestiones de comodidad, a una carretera totalmente destapada y agreste había que sumarle el calor infernal de esta gran selva tropical, donde en cualquier curva se encontraban dos carros y el que iba subiendo llevaba la vía, el otro a reversar hasta un clarito de la carretera para que el otro continuara, en esta maniobra muchos carros cayeron a las aguas del rio sucio que pasa furiosa 100 mts de profundidad, originando una de las tragedias mas comunes y lamentables de esos tiempos.
Cuando por razones extraordinarias, (ya fuera derrumbe, un carro pegado que obstruía la estrecha vía, o una varada inoportuna) nos tocaba cruzar este cañón con la luz del sol, la sensación era inigualable, las piedras, pantano y polvo de la carretera pasaban a un segundo plano, pues la exuberancia de la naturaleza atraía nuestra vista a otros objetivos.
Cascadas hermosas, ríos limpios y frescos, que muchas veces cruzaban sobre la vía, un verde intenso en estas grandes montañas escarpadas e infranqueables hasta para cualquier humano, cruce de animales por montones (armadillos, iguanas, perros de monte etc) que se podían hasta coger cuando quedaban estáticos encandilados por el carro, si te quedabas varado te tocaba aguantar hambre pues no se encontraban casas ni para un remedio.
En fin era otro mundo muy distinto al que percibíamos en la negra noche de los viajes “normales”
traigo toda esta historia para significar el cambio que se ha visto hoy en dicho sector.
después de la ardua guerra que se presento en los 90`s que tuvo su fase mas cruel en dicho cañón vino un periodo de “paz” el cual aprovecharon muchos que se regresaron, se apropiaron o invadieron grandes franjas de tierra adyacentes a la carretera, las cuales inicialmente les construyeron un cambuchito de madera y plásticos y a su alrededor plantaron pequeñas huertas con productos de pan coger, pero eran muy esporádicos y la población que se

encontraba era casi nula, hasta acá se consideraba normal.
Con el pavimento y el túnel de la llorona, llegaron los buses confortables y los viajes a cualquier hora lo que nos permitía ver los cambios que se iban dando en este pulmón verde en peligro.
Dejemos aca la historia y pasemos al presente, hoy vemos casi pueblos enteros al bordo de la vía, aquel verde intenso hoy solo lo vemos en las zonas mas altas, los ríos ya no pasan encima de la carretera, pues su mermado cauce alcanza a pasar debajo de los puentes, aquella cascada imponente que antes nos maravillaba ahora es hermosa solo en invierno que es cuando crea nubes de vapor que adornan el verde a su alrededor.
La cantidad de niños que se ven en la via alegran, pero también preocupan, pues van creciendo en estas latitudes que por lo general son malsanas para ellos, cada vez es mas evidente la potrerizacion de estas montañas
los animalitos que antes se pavoneaban por la vía libremente, hoy mueren bajo las llantas de la gran cantidad de vehículos que transitan.
Con solo este dato nos damos cuenta de lo accesible que se volvió este ecológico sector, en los 80`s un viaje entre dabeiba y mutata se podía demorar hasta 4 horas hoy este trayecto se hace en 50 minutos, los ríos antes inhóspitos hoy son visitados por cantidades de turistas que a lo mejor no son muy ecológicos.
Pero los mas preocupante es que hay gran cantidad de cambuches de tela verde con una hoja de zinc donde se alojan grandes cantidades de mineros algunos de raza negra (algo raro por acá) lo que indica que están buscando el personal idóneo para revolcar toda esta reserva en busca de oro, con las consecuencias que ya se están viendo, hay un río que en verano ya no pasa ni una gota de agua bajo su puente, somos conscientes que estos colombianos pobres están trabajando, pero de seguro que en un futuro muy próximo, traerán su familia de sus lugares de origen, el choco, el bajo cauca o de algunos pueblos antioqueños desde donde vinieron.
Los cauces de los ríos, se ven removidos, y aunque sea minería artesanal, son muy grandes los daños que se le causa a este que era considerado un pulmón, ya que esta zona hace parte de el gran corredor ecológico que viene de Centroamérica, pasa al choco, sigue en Antioquia y entra por este sector de mutatá y dabeiba, sigue por el nudo de paramillo hasta las depresiones del cauca y luego del magdalena hasta la frontera con venezuela en el sector del catatumbo, y llega a venezuela, este cinturón trasversal alberga gran cantidad de especies de flora y fauna que se ve cada vez mas amenazado.
Me adelanto al futuro y voy a predecir que pasara, dabeiba y mutatá tendrán un desproporcionado crecimiento poblaciónal, que desplazara a los nativos y los privará de tener servicios de calidad, y vivienda digna, la moral de los jóvenes se vera transformada ante el asedio del dinero y de las diversiones poco sanas, el parque automotor (especialmente las motos) crecerán en un 1000 % y transitaran por todo este cañón aumentando los accidentes y la congestión, veremos hoteles y moteles en veredas como pegadó, vallesí, piedras blancas etc
Queda como anécdota que le he contado a mis hijos por ejemplo las bañadas en rió en tiempos en que nos tocaba amanecer en la carretera y al amanecer contemplábamos toda esa belleza. o el día que un ayudante se tiro del bus ante un frenazo brusco del conductor al quedar petrificado un gurre o armadillo por las farolas del carro y luego llegar el ayudante con el gurre agarrado de la cola, o el día que desde el carro le tomé la foto a una hermosa coral que iba serpenteando por la carretera, o los torrenciales aguaceros ( que ya no se ven) y que desbordaban las quebraditas y cruzaban encima de la carretera.
En fin, creo que hemos perdido mucho y lo mas triste es que esto ya no se recupera, pues la necesidad y la fiebre del oro es algo que crece como una bola de nieve.